Fue una pregunta que surgió en la charla que tuvimos con los alumnos y profesores de la Escola Joso. ¿Vale todo?
La respuesta corta es: Sí, pero lo que le vale a uno no tiene por qué funcionarle a otro.
La respuesta larga: Depende 😉
Prácticamente cualquier proyecto puede ser financiado a través de crowdfunding. El requisito indispensable es que le guste a los mecenas. No sólo grupos de música, arte, videojuegos, startups, gadgets… hay campañas crowdfunding para zapatos, o para un viaje a la Luna.
El alquiler de mi casa
Se utiliza este tipo de argumentos para despreciar el crowdfunding: voy a hacer una campaña para pagarme el alquiler.
Pero hasta algo así puede llegar a funcionar: imagina que eres un artista que vas a dedicar unos meses a tiempo completo a desarrollar tu proyecto. Si en tu campaña eres honesto con lo que pides y absolutamente transparente, tus mecenas decidirán si te ayudan. Difícil pero no imposible.
Lo que no funciona
Tres errores habituales:
- Que parte de lo recaudado se destine a una campaña de publicidad
- Que la cantidad solicitada sea espeluznantemente alta sin explicar por qué
- Que no expliques qué harás si superas el 100% o que digas: «para mí que me lo he currado»
¿Todo vale? Depende de ti y de tu proyecto. Pero por encima de todo, depende de tus mecenas.