Hoy vamos a analizar las tres principales críticas realizadas internacionalmente a las grandes plataformas de crowdfunding. Dichas críticas son, a nuestro juicio, muy constructivas para nuestro emergente sector. Pasamos a analizarlas una a una bajo la perspectiva de nuestro crowdfunding con asesoramiento experto.
La ‘universalización’ como condena.
Cuando una plataforma crece se enfrenta a críticas referentes a la calidad de los proyectos que se publican en ella. La ética o la viabilidad de la realización de los proyectos planteados son los dos principales aspectos puestos en duda. ¿El motivo? El filtro de aceptación de los proyectos puede ser demasiado laxo, algo que nosotros consideramos un error estratégico grave. Un proyecto puede no llegar a recaudar, pero la plataforma debe velar por que todos los que lo hagan sean solventes y no fraudulentos. ¿Puede haber un caso de fraude? Si, evidentemente, y el creador será el último responsable, pero la plataforma debe velar para que ello no ocurra con un análisis profesional y exhaustivo de los proyectos presentados al público.
El efecto viral puesto en tela de juicio.
El efecto viral de las redes sociales o de la comunidad de la propia plataforma ha llegado a analizarse como un efecto que puede llegar a generar éxito en proyectos que no deberían tenerlo. Aquí no coincidimos en absoluto con el análisis ya que para nosotros la viralidad generada por un proyecto se corresponde con el planteamiento de su campaña: la transparencia, la claridad, la rigurosidad, la comunicación de la misma son factores claves de éxito que deben considerarse. Si una campaña genera viralidad y tiene apoyos, será como consecuencia de una estrategia de campaña bien planteada. Luego, evidentemente, hay que corresponder a los mecenas con igual rigurosidad y entregar todas las recompensas ofrecidas.
Emprendedor tradicional vs emprendedor por crowdfunding.
Para acabar se suele contraponer al emprendedor tradicional con el “nuevo” emprendedor que busca los fondos a través del crowdfunding. Se analiza la búsqueda tradicional de fondos con relaciones humanas, trabajo comercial, trato personal, y se contrapone a la fórmula ‘mágica’ del crowdfunding. Aquí volvemos a estar en desacuerdo con esta crítica, para nosotros NO HAY diferencia entre ambos modelos de emprendedor, el creador de una campaña de crowdfunding debe implicarse y trabajar de la misma forma que un emprendedor tradicional. De otro modo su campaña nunca tendrá el éxito deseado, y lo que es más grave, el creador se perderá la oportunidad de entablar un contacto único y especial con sus mecenas y seguidores.
Y por ahora nada más, seguimos trabajando, saludos y ¡let’s projeggt!